martes, 30 de agosto de 2011

87.688 productores desaparecieron del sector agropecuario , en solo 14 años


En catorce años, desaparecieron 

del sector agropecuario
 
87.688 productores.
Agrositio.com

El vicepresidente de Confederaciones Rurales Argentinas, José Basaldúa, estuvo presente el fin de semana pasado en la         Expo-Venado 2011 que convocó a más de 60.000 visitantes dejando a las claras su peso y potencial dentro de una de las zonas productivas más importantes.
“En el complejo sector agropecuario encontramos una gran diversidad, complejidad y dispersión de situaciones productivas, económicas y sociales. Productores que presentan por su escala o ubicación, o por su expansión vertical, o por una relación especial con el poder político, una condición económica y financiera acomodada. Pero también en este mismo espacio encontramos, y no son pocos, otros actores de la producción primaria que están siendo expulsados de la escena rural, y otros tantos que están en la antesala de decidir su emigración del campo, no por gusto sino por ser la única opción ante la falta de acceso al capital de trabajo y al ahogo de los costos fijos y de la elevada presión fiscal”, dijo Basaldúa en el discurso inaugural de la exposición rural organizada por la Sociedad Rural de Venado Tuerto.
El vicepresidente de CRA también se refirió a la ruralidad desde una perspectiva social y humana que va más allá de lo económico. “De acuerdo a números oficiales desde 1988 hasta el 2002, en catorce años, desaparecieron del sector agropecuario 87.688 productores, a un promedio de 6.263 productores por año. Desde el 2002 hasta el 2008, en seis años, dejaron el campo 56.952 agricultores y ganaderos, a un promedio de 9.492 familias de productores agropecuarios por año, un 51% más de ciudadanos expulsados del campo que en la ultima década del siglo XX”.
Basaldúa también se refirió a la finalidad del Plan Estratégico Agroalimentario y Agroindustrial (PEA), manifestando que “avala los errores y los horrores de lo hecho en los últimos cinco años en política agropecuaria, y que comprenden 10 millones de cabezas de ganado bovino menos, la peor cosecha de trigo de los últimos 100 años, la superficie de girasol más baja de los últimos 20 años, maíz otro tanto, producción lechera estancada, y economías regionales que no son sostenibles”.
Y agregó: “También se dan producciones que cuando tienen una recuperación favorable, como el algodón, son intervenidas y sus precios caen volviéndolas inviables, haciendo que este modelo de país productivo sea incompatible con una Argentina inclusiva e integrada, en crecimiento y en desarrollo, con un campo con rostro humano”.
Después de una semana cargada de cuestionamientos hacia el sector agropecuario, desde “CRA creemos que cuando la confusión y la incertidumbre parecen ocuparlo todo, las instituciones deben refugiarse en los principios y en los valores que formaron parte de la matriz fundacional de este país”, concluyó Basaldúa.